Tipos de depresión

La depresión puede manifestarse de diferentes formas y niveles. Si bien todas se caracterizan por un estado de ánimo bajo, falta de interés o impedimento de disfruta, baja autoestima y niveles disminuidos de energía, podemos diferenciar diferentes tipos según la fase en que se presenta. Reconociendo la alternancia entre estado de ánimo normal y estado depresivo podemos definir lo siguientes tipos de trastornos depresivos:

• Depresión mayor: es el peor estado de malestar y el más agudo. Suele aparecer en la adolescencia o adultez joven y sus episodios duran un mínimo de 2 semanas hasta el año, con estado de ánimo depresivo persisten y/o disminución del interés o placer por todas o casi todas las actividades. Su carácter suele ser recurrente, por lo que tiende a cronificarse sino se interviene eficazmente.

• Trastorno depresivo persistente (distimia): es de menor gravedad y suele aparece en la adolescencia y se persistente, con episodio de intensidad menor, pero de evolución crónica (más de 2 años), sin periodo de estados de ánimo normal y con sentimiento de incapacidad, dificulta para tomar decisiones y somatizaciones. Es el tipo menos agudo, pero dura mucho tiempo, experimentando depresión diaria. Los sentimientos de tristeza no son tan fuertes, y es más característico los sentimientos de falta de propósito y desmotivación.

• Trastorno bipolar (depresión maniaca): es un trastorno caracterizado por dos fases de cambio de humor, una de depresión aguda, y otra de estado de euforia exagerado (manía). Estos altibajos extremos pueden producirse de manera muy rápida, de la noche a la mañana, o de forma más pausada, de año en año. Es un trastorno severo, donde la depresión puede durar años, por lo que requiere de fármacos estabilizadores del ánimo, psicoterapia y atención al entorno próximo.

• Trastorno disfórico premenstrual: es una prolongación grave y/o incapacitante del síndrome premenstrual, caracterizándose con síntomas depresivos graves, irritabilidad y tensión días antes de la menstruación y duran hasta los primeros días del periodo. Se experimenta una fuerte labilidad afectiva con cambios de humor constantes, irritabilidad intensa y enfado con ansiedad y tensión. Es posible que se necesite de medicamentos para prevenir o minimizar los síntomas, como los antidepresivos, la píldora anticonceptiva, suplementos nutricionales, y cambios en la dieta y estilo de vida.

Esperamos tus ideas, dudas y sugerencias en el apartado de comentarios y nos vemos en las redes sociales: Facebook (@espaciopsicofamiliar), Instagram (@espaciopsicofamiliar) y Twitter (@EspacioPsico1).